Por primera vez en sesenta y tres años, OGC Nice vivirá unos cuartos de final europeos. Los Aiglons se clasificaron para los cuartos de final de la Europa League Conference, al vencer al conjunto moldavo del Sheriff Tiraspol (3-1), el jueves 16 de marzo, en el Allianz Riviera. Fueron los últimos representantes franceses en la Copa de Europa.

Ganadores ya por 1-0 en la ida hace una semana, los niçois fueron marcados por Gaëtan Laborde (30mi), Terem Moffi (53mi) y Billal Brahimi (79mi). Conocerán a su próximo rival cuando se realice el sorteo el viernes a las 14:00 horas en Nyon, Suiza.

El Niza, sin embargo, se fue con muchos handicaps: el equipo se vio privado de Sofiane Diop, Youcef Atal, Antoine Mendy, lesionado, y Dante, sancionado. Peor aún, el indispensable Hicham Boudaoui, que sin embargo apareció en el grupo comunicado el día anterior, se rindió en el último momento, insuficientemente recuperado de un golpe en la cadera recibido en Nantes el domingo.

El futuro Kephren Thuram azul en la maniobra.

Sin duda por todas estas ausencias, el equipo de Niza se tomó un tiempo para tomar la medida de su rival. A pesar de su dominio, empezó a acercarse tarde a los goles del ucraniano Maxym Koval. El primer intento de los Aiglons, fichado por Aaron Ramsey, ligeramente desviado a córner, no llegó hasta el 25mi minuto.

Luego, en una contra perfectamente iniciada por Laborde, el Niza se puso en ventaja. El ex del Rennais confió en el futuro Azul, Khephren Thuram, que le impulsó hacia las porterías contrarias. Tras 80 metros de sprint, Laborde se ofreció, con un buen clavado, el tercer gol europeo esta temporada además de un triunfo ante un Nice Kop abarrotado (1-0, 30mi).

Lea también: Fútbol: tres novatos y veteranos para abrir el nuevo capítulo de la selección de Francia

Aliviado, Niza mantuvo entonces su vigilancia. Si el Sheriff solo acertó una vez, desde lejos, por Moussa Kyabou (37mi), a Moffi le faltó delicadeza (45mi+1) y Pablo Rosario, de prontitud (45mi+2) para doblar la apuesta.

Poco a la vista en la primera mitad, Brahimi y Moffi sacaron más profundidad tras el descanso. Primero, el argelino no pudo con Koval (49mi). Pero el nigeriano no se lo perdió.

Tras un doblete con Rosario, pasó por la retaguardia moldava, antes de enviar un tiro cruzado ganador entre las piernas del defensa zimbabuense Munashe Garananga (2-0, 53mi).

La carga victoriosa de Brahimi

Esta vez, sin embargo, los hombres de Didier Digard, relevado por Julien Sablé en la Copa de Europa -la UEFA le reprocha no poseer todavía un diploma de entrenador profesional- perdieron la concentración. El excelente delantero burkinés Abdoul Tapsoba sancionó una serie de errores de Melvin Bard y Jean-Clair Todibo (2-1, 55mi).

Todos los días nuevos crucigramas, Sudoku y palabras encontradas.

Jugar

Digard luego hizo cuatro cambios a la vez (67mi). Pasó de un 4-5-1 a un 5-4-1. El pueblo de Niza pareció desestabilizado por un tiempo, empujado por la presión opositora. Pero tras dejar tocado al defensa Youssuf Ndayishimiye y dar entrada al joven centrocampista Reda Belahyane, Digard rectificó. El Niza volvió al 4-5-1 y recuperó el control del mediocampo (75mi).

A Brahimi le bastó con hacer sonar la carga. Moffi golpeó el poste. Pero el joven internacional argelino siguió bien y aseguró una clasificación histórica (3-1, 79mi).

Lea también: Artículo reservado para nuestros suscriptores El fútbol europeo aplastado por el poder financiero de los clubes ingleses

El mundo con AFP