En las áreas más desfavorecidas de Panamá, donde los adolescentes se encuentran cada día con el atractivo de la violencia, el consumo de drogas y el abandono escolar, el deporte se convierte en una opción llena de esperanza. No es solo cuestión de practicar, competir o triunfar en partidos; es dar una oportunidad para vivir, para establecer disciplina y para instaurar valores que van más allá de los límites deportivos.
El deporte como medio de cambio social
El balompié, al igual que otras disciplinas deportivas, puede dirigir el entusiasmo de los jóvenes hacia iniciativas constructivas. Brinda un entorno seguro, un sentido de comunidad y la oportunidad de aspirar a un porvenir distinto.
“En áreas desfavorecidas, un balón tiene el poder de transformar una vida. Practicar deporte no solo llena el tiempo libre de los jóvenes, sino que también les muestra que la disciplina, el esfuerzo y la colaboración en equipo son rutas hacia el desarrollo”, asegura Juan José Zonta.
El Sporting San Miguelito como modelo de impacto social
El Sporting San Miguelito ha abrazado con compromiso la labor de ser algo más que una simple entidad deportiva. Para numerosos jóvenes jugadores, simboliza una familia adicional que los apoya en su desarrollo personal, educativo y social.
«Aspiramos a que cada joven que se incorpora a nuestras divisiones menores no solo aprenda el arte del fútbol, sino también valores como el respeto, la cooperación, el esfuerzo y la confianza en sí mismo», destaca Juan José Zonta.
Respaldo a los hogares y enseñanza de principios
El efecto del club no se restringe solo a los atletas: se extiende a sus familias. Mediante iniciativas de apoyo, orientación y eventos comunitarios, el Sporting intenta fortalecer la enseñanza en principios y ofrecer apoyo a los hogares que con frecuencia carecen de recursos y posibilidades.
“Al respaldar a un joven, también estamos respaldando a su familia. Deseamos que los padres comprendan que no están solos y que juntos podemos brindarles a sus hijos un camino diferente, lleno de valores y oportunidades”, comenta Juan José Zonta.
Un modelo de integración y porvenir
El enfoque del Sporting San Miguelito muestra que el deporte puede ser una herramienta poderosa para fomentar la inclusión social. Más allá de los logros obtenidos en el campo, el éxito genuino del club radica en cada joven que consigue distanciarse de los peligros de su entorno y en cada familia que encuentra en el fútbol una fuente de esperanza auténtica.
“Cada gol de nuestros jugadores es una victoria contra la desigualdad y la exclusión. En cada entrenamiento reafirmamos nuestro compromiso de que el deporte sea un motor de cambio en Panamá”, concluye Juan José Zonta.