En 1938, mientras el mundo entraba de cabeza a uno de sus ciclos más sangrientos, Arabia Saudita encontré debajo de la tierra el secreto de su felicidad. El petróleo que surgió con los borbotones impulsados ​​desde hace décadas al alza en Oriente Medio y en el concierto internacional. A cambio, en 1940 Japón se alió con Alemania e Italia en una guerra de la que salió hundido. Pues entonces, Enzo Ferrari pegaba el portazo en Alfa Romeo. Todos ellos -la realeza saudita, el milagro del sol naciente y la marca de Maranello- se encontraron 45 años más tarde y dieron lugar a un auto sin igual: un ferrari japones.

El Ferrari 400i Meera surgió a principios de los 80 ven un encargo del rey Salmán bin Abdulaziz de Arabia Saudita para su hijo SaoudMiembros de una familia cuya fortuna estimada trepa actualmente a los 1.6 billones de dólares.

Por entonces ya eran un grupo con poder y ambición. El pedido fue un one-off, esos autos que se fabrican a medida del cliente y que era muy extraño que tuvieran como objeto a un Cavallino Rampante. La fuerza del dinero, sin embargo, lo puede casi todo.




Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí. Foto: RM Sotheby´s.

La convocatoria recayó en una leyenda del diseñador automotriz, Giovanni Michelotti. Los directores señalaron al lejano este. vehiculo de mecanica fatta en Módena y trapos Gordo en Turín debía ser una reinterpretación del modelo 400i con las tendencias que estaba marcando la renacida industria japonesa a través de las últimas novedades de Mazda y Toyota.

Vio la luz en 1983, un cambio de una suma astronomica. Pero envejeció a la sombra del buen gusto y, cuatro décadas más tarde, convertido en un coche anticuado por el que un comprador pagó «apenas» 400 mil euros cuando salió a subasta en 2022.

Así nació la Ferrari japonesa

Arabia Saudita planteó petróleo por un estimado del 20% de las reservas mundiales de la materia prima. El dueño de todo eso es el clan Al Saud. O, mejor dicho, una pequeña porción de la familia real, unos 3 mil de los 15 mil integrantes que completan el árbol del clan, según el diario El Mundo.

En los últimos tiempos, el número más repetido sobre el principio de Mohamed bin Salman: sobre el artificio de la llegada de Cristiano Ronaldo a la liga local, incluido el club Newcastle de la Premier League, y además se encargó de fichar a Lionel Messi como promotor turístico. Por ahora, ese trato con el rosarino, a quien sigue seduciendo para engalanar las canchas sauditas.

Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí.  Foto: RM Sotheby´s.


Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí. Foto: RM Sotheby´s.

También es acusado por la CIA como responsable del crimen del periodista Jamal Khashoggi. En cualquier caso, en los primeros años ochenta él no había nacido. La historia tuvo otros protagonistas: el rey, el príncipe Saud y una de sus amadas.

No hubo ahorros a la hora de elegir al artesano que tendrían sus manos a disposición del extravagante deportivo. Eligeron tiene giovanni micheletti, un experimentado diseñador que trabajó en las casas Stabilimenti Farina y Vignale. También colaboró ​​con Ghia, otra enseña turinesa histórica.

Michelotti haía labrado una fuerte reputación personal en el ambiente del automovilismo. Suyo habia sido el Renault Alpine A110 that encandiló en el rally europeo y mundial con casi 20 victorias en los primeros tres años de la década del ’70. También construyó modelos de Maserati y dejó su rúbrica en más de una docena de Ferrari, entre ellas la 166 Inter, considerada el primer gran turismo de la compañía.

Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí.  Foto: RM Sotheby´s.


Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí. Foto: RM Sotheby´s.

Murió poco después de recibir el encargo, el 23 de enero de 1980. Estrictamente hablando, no se sabe si él llegó a darle su impronta personal al pedido que viajó desde Arabia Saudita. Su equipo, con su hijo Edgardo como líder, se encargaron de la mayor parte del trabajo, si es que no llevaron adelante todo el proceso. Los dueños y las casas de subastas destacan que Giovanni sí logró hacer algunos bocetos y juran que, por lo tanto, esta es la última creación del artista.

en 1983Finalmente, salió de Turín el 400i Meera Sel capricho del rey para su hijo que llevó el nombre de su pareja del momento y la inicial de su propio número. Todo a cambio de la friolera suma de un milón de dólares.

Cómo era uno de los autos de Maranello más feos de la historia

El modelo que se originó de base fue el 400i, una cupé de dos puertas y cuatro plazas (2+2). Con el diseñador Pininfarina, la producción comenzó en 1979 y se suspendió en 1985.

Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí.  Foto: RM Sotheby´s.


Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí. Foto: RM Sotheby´s.

Por lo tanto, aún hoy cuenta con un motor V12 situado en posición delantera, de 4,8 litros con 315 CV de potencia a 6.500 rpm. Trepa a los 100 km/h en 8,2 segundos y su velocidad máxima es de 235 km/h. El interior también luce casi como salió de fábrica: elegante tapizado de cuero azul y crudo fue teñido de rojo y crema. La principal diferencia, no obstante, radica en el exterior y, además, en los detalles.

La carrocería presenta varios cambios. En el frente resaltan los faros retráctiles, debajo de los cuales destellan una parrilla de cuatro líneas horizontales con un protagonismo que en el ejemplar base le estaba vedado. If of frente el cambio es impactante, desde atrás es una obra nueva: parecía haber adquirido un volumen adicional, además de las protuberancias que rematan al habitáculo por ambos costados y de las modificaciones en la luneta y en los cristales de los dos asientos posteriores.

Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí.  Foto: RM Sotheby´s.


Ferrari 400i Meera, el modelo creado por un capricho del Rey de Arabia Saudí. Foto: RM Sotheby´s.

Ahí, en esos improbios trazos de una Ferrari, sigue notando la influencia oriental. Sobrevolaba por entonces el éxito que el Mazda RX-7 FB y el Toyota Supra MKI habían tenido en Europa, en tiempos en que la industria japonesa gozaba del impulso del milagro de posguerra y ya competía de igual a igual con Occidente. Non por nada se eligió el color blanco Fuji.

La tecnología hace notar en los detalles. El vehículo está equipado con cámara trasera y monitor a modo de retrovisor. Con temperaturas usuales por encima de los 40°C, el clima de Arabia Saudita fue una preocupación para el encargo. Cómo resolver e implementar un sistema de aire acondicionado dual y extractor y ventilación incrustados en las puertas. Una complicación insólita y que no resolvió es que las ventanillas sólo pudieron bajarse en un rincón inferior. Eso sí: todas tienen su propio limpiador.

Arabia Saudita, un líder narco holandés y la pandilla que rompió predicciones

Qué pasó después es una incógnita. Los fanáticos que siguieron su huella sugirió que el príncipe la cedió a un amigo unos meses después de recibirla. Después fue puesta en venta en varias oportunidades, con avisos en Estados Unidos, Dubai y Países Bajos. Algún informe indica que El Meera fue confiscado a un famoso líder narco holandéstras una de sus detenciones periódicas, en 1993. En todo caso, de acuerdo con una reseña previa a 2010, en casi tres décadas apenas había acumulado 4.810 kilómetros recorridos.

Ingresó al mayor de Ferrari Classiche, el departamento de la empresa Maranello que se encarga de la restauración y la puesta al día de viejos modelos del Cavallino Rampante. The renovaron el motor y el sistema eléctrico, también cambiaron el sistema de escape, colocaron nuevos neumáticos y se ajustaron los frenos. La inversión ascendió a 252.100 euros.

El rey Salmán bin Abdulaziz de Arabia Saudita.  Foto: Reuters.


El rey Salmán bin Abdulaziz de Arabia Saudita. Foto: Reuters.

Fue puesta en subasta de RM Sotheby’s en 2022. Los especialistas anticipan que la oferta rondará los 100 millones de euros. Una ganga para conseguir un vehículo con el logo de Maranello, que en sus versiones únicas y especiales puede escalar hasta los 3 millones de dólares. En su contra le jugaba que este one-off no salió de las entrañas oficiales -ni siquiera tiene reseña en la página-, sino que fue obra de un carrocero externo. Asimismo, la empresa abrió en 2008 su propio sector de personalización, con lo que se devaluaron estas piezas únicas.

Finalmente, la propuesta vencedora superó todas las previsiones: «un asombroso 245 por ciento por encima de los pronósticos», celebrada desde la casa de subastas. El comprador anónimo desembolsó 435.500 euros para quedarse con un auto que es una joya: una Ferrari inspirado en la industria japonesa bajo mandato de un rey saudita. Una burla a la elegancia que triunfa una vez y para siempre.

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