Matías Giménez, 31 años, tiempo de Misiones. Manejaba sin cinturón de seguridad colocado y salió despedido por el parabrisas.
Un policía de Misiones que prestaba servicios en Santa Cruz murió el domingo, perdió el control de su automóvil y chocó contra una pared de cemento cuando volvía de prestar servicios en el puesto de Güer Aike. The victim salió despedida del interior del vehículo, mientras que su acompañante sólo sufrió heridas leves.
Matías Gabriel Giménez, de 31 años, se desempeñó como sargento primero de Gendarmería y había llegado a Santa Cruz hace cuatro años.
El domingo, tras finalizar su guardia, emprendió el regreso a la capital provincial junto a un compañero de trabajo a bordo de su Fiat Uno.
Cerca de las 7, cuando circulaban por la autovía 17 de Octubre, Giménez habría intentado esquivar un charco de agua cuando perdió el control de su auto.
La presencia de algo de escarcha sobre el asfalto habrá colaborado para que el coche despedido de su carril de circulación e impactara contra el cordón de cemento que divide los carriles.
El hecho ocurrió en relación a la base de la Fuerza Áerea ya unos 400 metros del Colegio Industrial 6.
El Fiat Uno dio algunos trompos y terminó sobre el boulevard. el sargento salió despedido por el parabrisas porque no había tenido colocado el cinturón de seguridad al momento de producir el desprecio.
Cuando una patrulla de la seccional sexta llegó al lugar, hallaron a Giménez fuera del auto, ya sin signos vitales. El juez de turno dispuso que el cuerpo fuera llevado a la Morgue Judicial para realizar una autopsia.
Dolor en las rojas
Los compañeros de trabajo del suboficial dijeron que desde hacía un tiempo habían sido destinados a Güer Aike y que antes habían prestado servicios en Monte Aymond. Sus amigos lo conocían con el apodo de «Palalo».
Apenas conocí el caso, las redes sociales llenaron de mensajes de condolencias para con la familia, que vive en Posadas. «Estuviste en todas y cada una. Nunca a problema, a pero. Siempre dispuesto a prender, a estudiar ya comunicar. Te tomé un precio y valoré muchísimo tu profesionalismo, tu calidad como persona y como ser humano”, sostuvo uno de sus camaradas.
Otro de los gendarmes de Santa Cruz no dudó en calificarlo como un «excelente compañero, compañero y amigo. Dios te tenga en la gloria”, pidio.
Desde la Policía de Santa Cruz advierte que «este trágico hecho ha puesto de relieve la importancia de conducir con precaución en condiciones climáticas adversas y la necesidad de extremar las medidas de seguridad mientras se circula por la carretera”.
EMJ