La Roja está de vuelta. Más de diez años después de haber reinado en el mundo del fútbol, ​​España vuelve a las alturas por una vía más estrecha, la Liga de las Naciones, ganada a Croacia (0-0, 5-4 en fichas), el domingo 19 de junio, en Róterdam. (Países Bajos). Tras ganar la Eurocopa 2008, el Mundial 2010 y la Eurocopa 2012, España sucede a Portugal (2019) y Francia (2021) tras la primera final de este nuevo torneo disputada en los penaltis.

Croacia, especialista en el ejercicio, hizo una reverencia, el Rennais Lovro Majer y luego Bruno Petkovic vieron a Unai Simon detener su intento. Sin embargo, Aymeric Laporte había ofrecido un respiro a los croatas al anotar su punto de partido en el travesaño en el último tiro de la serie de cinco. El defensa de origen francés aún se tomó la revancha, dos años después de su fracaso en el mismo tramo de la competición, ante los Blues (2-1), en Milán.

También es revancha para el nuevo técnico español, ya amenazado tras su segundo encuentro al frente de La Roja -derrota en Escocia (2-0)- y que ganó un trofeo tras el cuarto. La generación Rodri, plasmada por Luis Enrique y retocada por Luis de la Fuente, se impuso como fuera, en un ambiente loco con las canciones de los croatas.

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Los croatas aún terminan con la medalla de plata, como en la Copa del Mundo de 2018, y suman esta medalla a los dos bronces de los Mundiales de 1998 y 2022, pero aún sin oro. Pueden consolarse con el título oficial de mejor público de Europa, y esperar que el capitán, Luka Modric, de 37 años, no quiera retirarse internacionalmente por este fracaso.

Más de 25.000 seguidores croatas

Afortunadamente existía este ambiente para hacer olvidar una final que no cumplió las promesas de duelos anteriores entre los dos equipos. El hirviente estadio De Kuip, que parecía un damero gigante, ocupado casi exclusivamente por camisetas de cuadros rojiblancos, salvo dos palcos rojiamarillos para los 6.000 españoles. Anunciados 25.000, los croatas eran mucho más numerosos.

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Pero vestidos de azul, los croatas no lograron difundir esta fiebre sobre el terreno. Si la posesión les favorecía, España dispuso de más ocasiones, la primera de Álvaro Morata (9mi) Gavi (12mi), Marco Asensio (57mi) o Rodri (66mi). Croacia tuvo su oportunidad por Andrej Kramaric o Mario Pasalic, ante el “francés” Robin (24mi) antes de golpear más tarde en la pequeña red (61mi). Los Vatreni no rentabilizaron su posesión porque Petkovic, que entró en lugar de Pasalic (62mi), multiplicando las malas decisiones, a veces multiplicando el enfado de sus compañeros. Y el desgraciado falló el tiro fatal a puerta…

Ansu Fati podría haber evitado la prórroga sin una atajada en su línea de Ivan Perisic (84mi), aún excelente, en un punto de partido real. Los jugadores ya se habían levantado del banquillo español para correr y celebrar el gol. Pasado el tiempo reglamentario, Nacho también logró una parada, entrando con el tacón en los pies de Lovro Majer, que corría hacia la portería (100mi). Casi todo el estadio reclamó el penalti, pero el gesto fue regular.

Finalmente, Dani Olmo, ex Dinamo Zagreb de 16 a 22 años, «crujió» dos nuevos puntos de partido (104mi108mi). Pero España aguantó con nerviosismo esta vez, después de dos eliminaciones en rápida sucesión contra Italia y Marruecos.

El mundo con AFP